Una bicicleta con silla para niños es un medio de transporte excelente para movernos pro la ciudad o el campo, además de ser más divertido, económico y respetuoso con el medio ambiente. Los niños que desde pequeños ven a sus padres realizar esta actividad física y utilizar medios saludables para su movilidad adquieren un aprendizaje muy valioso.
Pero para que el paseo resulte agradable y puedas exprimir todas las ventajas de ir en bici, es necesario garantizar la seguridad de los más pequeños, y desde Kleta te explicaremos cómo.
Sillas de la bici para bebés y niños
Seguro que hay cientos de rutas en bici con niños para que podáis explorar juntos vuestra ciudad cualquier tarde entre semana, y algunas a las afueras a las que puedes escaparte durante el finde. Ni siquiera es un problema no tener bici propia, puedes hacerte con nuestra suscripción sin compromiso a largo plazo.
Simplemente, elige entre una bicicleta mecánica y una bicicleta eléctrica, añadiendo el sillín portabebés como accesorio y disfruta, sin preocuparte de robos ni de hacer grandes inversiones para ponerla a punto.Pero antes de que os pongáis en marcha, queremos repasar algunas de las opciones de asientos de bicicletas para niños más conocidos.
Silla trasera
Probablemente, se trate del formato más conocido de silla de bicicleta para niños. Quedan sobre la rueda trasera, en algunos casos apoyándose sobre la cesta y en otros en la parte trasera del cuadro de la bicicleta.
Dado que son las más populares, hay una amplia variedad de ellas para elegir, y esta es una de sus principales ventajas.
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Además, son más seguras, cómodas y tienen más prestaciones, pues es posible regularlas en altura y tienen varias posiciones de reclinado según el modelo. Sin embargo, el campo de visión de los niños queda limitado y es más difícil comunicarse con ellos. Además, ten en cuenta que el peso y la posición en la que va colocada hace que se altere el comportamiento de la bici.
Silla delantera
Con frecuencia se convierte en la silla para bici de bebé alternativa a la trasera. Se monta sobre la barra de la bici, la que va desde el manillar al tubo que da soporte al sillín, de manera que el niño queda delante.
Su gran ventaja es que puedes ir viendo a tu pequeño en todo momento, y su vista también es más agradable. Además, son más ligeras y ocupan menos espacio en la bici. Sin embargo, los contras son que hay menos espacio para las piernas al pedalear, y que si el niño es alto no será factible.
Si buscas un modelo de silla portababebés, es más probable que lo encuentres en este formato. La cuestión del espacio, por lo tanto, puede ser un punto a su favor.
Remolque
No es un asiento de bicicleta para niño como tal, sino un vehículo adicional no autónomo que va anexado. Ofrecen muy buena capacidad de carga y reparten bien el peso, lo que contribuye a un control mayor de la bici.
Sin embargo, es un dispositivo más grande y pesado, más propenso a estropearse por la cantidad de elementos que tiene y que puede empujar a la bici en las frenadas. Además, debes asegurarte de que cumple la normativa vigente.
FollowMe
Las rutas con niños mayores que puedan llevar su propia bici se pueden hacer con un dispositivo tipo FollowMe. Se puede usar cuando haya que remolcar al pequeño porque esté cansado de pedalear o no pueda seguir el ritmo por cualquier motivoBasta con engancharlo al eje delantero de la bici del niño con el trasero del adulto. La rueda del niño quedará ligeramente levantada, pero son lo bastante estables. Su desventaja es que es una solución puntual, no una forma de llevar al niño siempre.
A la silla de la bicicleta para niños se suman otras opciones algo menos operativas y poco frecuentes como las bicis de cargo holandesa o las bicis de tándem o multitándem. La mejor solución a la hora de escoger rutas para hacer con niños pequeños son las sillas traseras y delanteras y, cuando sea algo mayor, un sistema que permita el remolcado si se cansa demasiado.
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